Duomo di Orvieto

El Duomo de Orvieto es un impresionante ejemplo de la arquitectura gótica italiana. Es una de las catedrales más icónicas y bellas del país, con sus mosaicos dorados y frescos intrincados que adornan las paredes. Construida a finales del siglo XIII con piedra y ladrillo, la catedral se alza majestuosamente en lo alto de una colina en la ciudad de Orvieto, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Su rosetón, flanqueado por dos imponentes torres, es una vista impresionante, al igual que su interior con sus numerosos frescos, esculturas y tumbas. La nave central alberga la Capilla de San Brizio, famosa por sus impresionantes frescos, realizados por el artista renacentista Luca Signorelli. Los visitantes también pueden admirar el tesoro de la catedral, que contiene joyas ornamentadas de oro y plata, artefactos religiosos y más. La cercana iglesia de San Lorenzo también merece una visita. Esta pequeña joya de iglesia contiene excelentes frescos del siglo XIV.